Con el anuncio de la dirección general del SENA sobre la creación de un nuevo centro de servicios en el municipio de Puerto Boyacá, se pone de manifiesto nuevamente el marchitamiento del Centro Pecuario y Agroempresarial de la Dorada CPyA. Todo esto ante la mirada pasiva de la dirección regional y de las autoridades locales y del sector empresarial de la región.
Mientras se anuncia una inversión que sobrepasa los 40 mil millones de pesos para la dotación e infraestructura de este nuevo centro de servicios en la región de la Magdalena medio, el CPyA, continua con su precaria infraestructura, los ambientes de aprendizaje deteriorados y la dotación escasa.
Los proyectos de modernización que se han presentado por parte del CPyA, ascienden a la suma de 3 mil millones lo que, en comparación con lo anunciado al nuevo centro de Puerto Boyacá, no representa ni la décima parte. Aun así, estos proyectos se encuentran lejos de ser materializados en el corto plazo.
No se entiende cómo después de que el CPyA administrara por más de una década los servicios de la Sede de Puerto Boyacá, manteniendo no solo las infraestructuras, sino toda la oferta institucional y los programas de formación (Registros calificados); ahora se le premie con olvido y la decisión política de que no se cuenta con los recursos para suplir las necesidades apremiantes de este centro de formación.
Desde SINDESENA Caldas, hacemos un llamado a la Dirección Nacional para que reevalúe su política de inversión y tenga en cuenta el llamado que se hace desde el CPyA, para que no se siga marchitando y que pasemos de ser el Centro de Formación de la segunda ciudad más importante del Departamento de Caldas, a solo una sede más de quien sabe cuál centro o de qué Regional.