El 18 de marzo, miles de aprendices, trabajadores del SENA y ciudadanos salieron a las calles en distintas regiones del país para exigir el respeto a sus derechos sociales y laborales, la recuperación del carácter laboral del Contrato de Aprendizaje. Desde el Amazonas hasta la Guajira, pasando por Antioquia, Atlántico, Bolívar, Boyacá, Caquetá, Casanare, Cauca, Cesar, Chocó, Córdoba, Cundinamarca, Distrito Capital, Guainía, Huila, La Guajira, Magdalena, Meta, Nariño, Norte de Santander, Putumayo, Quindío, Risaralda, San Andrés, Santander, Sucre, Tolima y Vaupés, la movilización fue masiva y contundente.
Al tiempo en la comisión séptima del Congreso, a puerta cerrada y de espaldas al pueblo ocho senadores de esta comisión, aprobaron sin discusión, ni argumentos serios, el hundimiento de la reforma laboral que como lo hemos dicho, devolvía derechos a la clase trabajadora, negando además la recuperación de derechos a miles de jóvenes que aspiraban a un empleo con garantías.
Con pancartas, consignas y un llamado a la justicia, los manifestantes dejaron claro que la lucha por la dignidad laboral y el derecho a un primer empleo digno no se detendrá, al tiempo que deja claro a los senadores Nadia Blel Scaff (Partido Conservador), Honorio Henríquez (Centro Democrático), Alirio Barrera (Centro Democrático), Esperanza Andrade (Partido Conservador), Berenice Bedoya (Alianza Social Independiente – ASI), Miguel Ángel Pinto (Partido Liberal), Ana Paola Agudelo (MIRA), Lorena Ríos (Colombia Justa Libres), que el pueblo colombiano sabrá de que ellos fueron los que le negaron estos derechos a la clase trabajadora y que en las urnas se deberá pasar esa cuenta de cobro.
